Porque lo que ves es lo que soy y no puedo cambiar.
Y, aunque escogimos el camino más fácil de seguir, sigo creyendo que a cada paso estamos equivocándonos.
Al fin y al cabo las cosas son como son porque fueron como fueron, y el pasado no se puede cambiar y, si hay una mínima posibilidad de conseguirlo, a lo mejor no merece la pena intentarlo ni luchar.
¿Qué puedo decir? Que qué grande es este amor y qué pequeña que soy yo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario